En el mundo financiero actual, una de las innovaciones más interesantes y accesibles tanto para los inversores novatos como para los experimentados es el concepto de comercio social.
Esta práctica ha transformado la forma en que las personas participan en los mercados financieros al permitirles no sólo invertir su dinero sino también aprender de otros inversores y aprovechar eficazmente su experiencia colectiva.
El trading social se define como una plataforma que facilita la interacción entre traders, permitiendo a los usuarios seguir y copiar automáticamente las operaciones ejecutadas por traders más experimentados y exitosos. Básicamente, los inversores novatos pueden replicar las estrategias de los expertos sin necesidad de poseer un conocimiento profundo del mercado o de tiempo para analizar constantemente las tendencias financieras.